Nube 9 -tributo a The Beatles-
Nota: Franco Stanta
Al mal tiempo, Nube 9:
Nunca imaginé que una noche tan volátil, en cuanto a su decisión de llover o no, fría y apagada podía desembocar en algo tan positivo. Al ingresar a Mr. Jones Pub (de lo mejor que hay en Ramos Mejía para escuchar buen rock y ambientado para ello), supe que había encontrado mi lugar en el mundo. Los aplausos, los juegos de luces resplandecientes y asombrosa similitud de Nube 9 con los legendarios Beatles. Mi admiración y la de todo aquel que se encontraba presente o bien quienes iban llegando, era la característica principal y lo que todos teníamos en común: la unión multigeneracional del ambiente.
Al son de risas, chasquidos de vasos de cerveza y mucho alboroto, “Let it be” dio una muestra de todo lo que un público rockero y a su vez nostálgico, quiere comenzar su noche: Pasividad y melancolía.
Tras una serie de canciones vinculadas al famoso y ya recurrente álbum “Abbey Road”, tales como “Oh Darling” y “Come Together”, llegó el momento más enérgico y fervoroso de la noche. Los espectadores crearon el clima ideal y el color necesario para que esto sucediera. La iluminación resplandeciente (una gama de rojo y azul), el delirio eufórico junto con el vitoreo y el clamor popular dieron el panorama perfecto para un desenlace único e irrepetible: “Lucy In The Sky With Diamonds”, logró que el público se manifieste en su máximo ritmo, incluso alguna que otra pareja se animó a improvisar un baile tratando de imitar a las viejas épocas de “Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band”.
Finalmente y con la aparición de Julián Carranza, Nube 9 decidió que era el momento justo para la antítesis en cuanto a ritmo y exaltación de la canción mencionada anteriormente, mas no pierde nunca el entusiasmo de todo aquel fanático o seguidor de la banda oriunda de Liverpool. “Hey Jude” demostró una vez más su capacidad de emocionar y por qué no llorar a toda una multitud, a través de los aplausos, el movimiento de cabeza típico de la canción y la entonación de la audiencia, dieron lugar a una de las mejores veladas.
Nube 9 con toda su performance y capacidad demostró que aquellos que no pertenecimos a esas épocas o generaciones, podíamos llegar a disfrutar e incluso a sentir en todo momento a los Beatles, y que además en un mismo entorno lograron que compartan un público de distintas generaciones, que de por sí no es poca cosa.